Sabemos que la delicada piel de los bebés requiere muchos cuidados y mimos, pero los polvos de talco no son adecuados para los bebés. El talco ha sido tradicionalmente usado para la zona del pañal, e incluso para otras partes del cuerpo, espolvoreándolo ligeramente por su agradable olor.
Sin embargo según recientes investigaciones no es una práctica recomendable, pues los polvos de talco resecan en exceso la piel de los lactantes, cuando lo mejor es mantenerla correctamente hidratada.
Además, es un agente de riesgo por los problemas provocados en el caso de su inhalación en exceso o a su ingesta accidental, pudiendo provocar problemas respiratorios e incluso asfixia.
Por ello es conveniente no dejar los polvos al alcance de los pequeños si es que tenemos algún envase en casa, aunque este producto tampoco sea demasiado recomendable para los adultos por las mismas razones.
El talco tapa los poros e impide que la piel respire adecuadamente, y en los niños alérgicos puede aumentar su condición, al ser fácilmente respirables sus partículas.De modo que a la hora de limpiar la zona del pañal lo mejor es, tras la limpieza, aplicar una crema hidratante específica para esa zona, sin colocar demasiada cantidad.En el caso de la Dermatitis del pañal, no está comprobado que el uso de talco, de almidón de maíz o fécula ayude a prevenirla o tratarla, y hasta a veces puede resultar contraproducente si se acumula en los pliegues del pañal, así que no vale arriesgarse pudiendo tratarla de otras maneras efectivas y nada peligrosas para el bebé. Tambien te recomendamos que cuando estés embarazada y te hagas una Ecografia 5D, no te eches ni cremas , ni aceites, ni talco.
